En verano cuando las temperaturas elevadas son excesivas solemos poner más atención a la hidratación, principalmente en los niños y en los adultos mayores quienes son más vulnerables no sólo a la deshidratación sino también a los golpes de calor.
Para prevenir el golpe de calor además de una hidratación adecuada (con bebidas sin alcohol, sin azúcar y sin cafeína), se recomienda evitar la actividad física y la exposición solar en los horarios de mayor calor, es conveniente permanecer en espacios frescos y ventilados, de ser necesario utilizar aire acondicionado ya sea en el hogar o en lugares públicos, usar en lo posible ropa holgada de colores claros y de algodón y refrescar el cuerpo mojándolo con agua.
En el estadio previo al golpe de calor se puede observar:
- Sudoración excesiva
- En los bebés puede verse la piel muy irritada por el sudor
- Piel pálida y fresca
- Sensación de calor sofocante
- Sequedad en la boca y sed intensa
- Cansancio o debilidad
- Malestar digestivo, falta de apetito, náuseas o vómitos
- Dolores de cabeza
- Irritabilidad (llanto inconsolable en los más pequeños)
- Mareos
Es importante poder identificar cuando una persona presenta un golpe de calor para poder actuar y de ser necesario pedir ayuda.
Ante una elevación de la temperatura corporal, en general por encima de 39 ° (en ausencia de otra causa de fiebre), que puede manifestarse luego de exponerse a un ambiente caluroso de forma prolongada, con o sin exposición solar, o luego de la realización de actividad física extenuante, podemos pensar que esa persona está sufriendo un golpe de calor. Se puede asociar a los síntomas antes mencionados y también a confusión, piel caliente y enrojecida, pulso acelerado, respiración rápida, o desmayo, este último puede ser el primer signo en los adultos mayores.
Qué hacer ante los primeros síntomas
Lo más importante es tratar de bajar la temperatura corporal, llevando a la persona a un lugar fresco, y tratando de enfriar el cuerpo con lo que se tenga disponible, colocando paños de agua fría en la nuca, axilas e ingle, proporcionando un baño o ducha de agua fría, abanicando y al mismo tiempo ofreciendo bebidas frescas que no contengan alcohol ni cafeína.
El golpe de calor puede presentar complicaciones principalmente en las poblaciones vulnerables, por lo que la consulta médica es necesaria en estos casos y siempre que no reviertan rápidamente los síntomas