Disquecia y Constipación Funcional del Lactante: Diagnóstico Diferencial y Manejo en la Práctica Ambulatoria

La disquecia y la constipación funcional son dos trastornos digestivos funcionales frecuentes en lactantes, que motivan un gran número de consultas pediátricas en el ámbito ambulatorio. Si bien ambas condiciones comparten la dificultad evacuatoria como síntoma cardinal, difieren en su fisiopatología, edad de presentación, consistencia de las heces y abordaje terapéutico. El correcto diagnóstico diferencial resulta fundamental para evitar medicalizaciones innecesarias y brindar contención efectiva a las familias.

La prevalencia de la disquecia del lactante varía según el método de estudio y la región geográfica. Estudios basados en encuestas a padres muestran cifras de hasta el 12% en Latinoamérica y el 11,6% en Asia, mientras que evaluaciones clínicas estrictas reportan entre el 0,9% y el 5,6% en Europa. En Argentina, según datos del Hospital Universitario Austral, puede observarse en hasta 1 de cada 5 lactantes durante el primer mes de vida. Por su parte, la constipación funcional afecta aproximadamente al 3% de los lactantes a nivel mundial, con cifras mayores (hasta 12%) en ciertas poblaciones.

La disquecia del lactante es una condición benigna, autolimitada y secundaria a una inmadurez en la coordinación neuromuscular entre el aumento de presión intraabdominal y la relajación del esfínter anal externo. No existe alteración orgánica, y forma parte del proceso madurativo del eje intestino-cerebro.

La constipación funcional, en cambio, se relaciona con la conducta retentiva del niño, que evita evacuar por miedo al dolor. Esto genera acumulación fecal, aumento de consistencia de las heces, y perpetuación del ciclo vicioso. Factores emocionales, cambios alimentarios y el inicio del control de esfínteres pueden actuar como desencadenantes.

El diagnóstico se basa en la anamnesis y el examen físico. Los criterios clínicos claves para diferenciar ambas condiciones son:

  • Edad de presentación:
    • Disquecia: <9 meses (más frecuente en los primeros 3 meses)
    • Constipación funcional: >6 meses
  • Consistencia de las heces:
    • Disquecia: blandas o líquidas
    • Constipación funcional: duras, grandes y dolorosas
  • Otros signos:
    • Disquecia: episodios de esfuerzo y llanto previo a la evacuación con resultado exitoso o no
    • Constipación: dolor al evacuar, hábito retentivo, posible distensión abdominal, incontinencia o impactación fecal

Signos de alarma que orientan a constipación secundaria (no funcional) Se deben descartar causas orgánicas cuando existen uno o más de los siguientes signos o situaciones:

  • Retraso en la eliminación del meconio (>48 horas de vida)
  • Falla del crecimiento o pérdida de peso
  • Distensión abdominal persistente
  • Vómitos biliosos o recurrentes
  • Presencia de sangre o moco en las heces
  • Historia familiar de enfermedad de Hirschsprung u otras malformaciones intestinales
  • Malformaciones anorrectales visibles, desviación de pliegue interglúteo, hoyuelo sacro, mechón de pelo lumbar
  • Ampolla rectal vacía con abdomen lleno
  • Alteraciones neurológicas o hipotonía
  • Signos clínicos de hipotiroidismo

Ante cualquiera de estas manifestaciones, se recomienda la derivación al especialista para estudios complementarios y abordaje etiopatogénico adecuado.

Tratamiento

  • Disquecia:
    • Educación y contención familiar: explicar la naturaleza benigna y transitoria del cuadro
    • Reforzar lactancia materna (favorece heces blandas)
    • En alimentados con fórmula, considerar el uso de productos con prebóticos o sinbóticos
    • Evitar supositorios, estímulo rectal o laxantes
  • Constipación funcional:
    • Cambios hábito-dietéticos: mantener o iniciar LM, revisar preparación de fórmulas, aumentar fibras si corresponde
    • Tratamiento farmacológico (cuando esté indicado):
      • Polietilenglicol (PEG 3350): laxante osmótico de primera elección.
        • Dosis para desimpactación: 1 a 1,5 g/kg/día, durante 3 a 6 días.
        • Dosis para mantenimiento: 0,4 a 0,8 g/kg/día.
      • Lactulosa: alternativa si el PEG no está disponible o es mal tolerado.
        • Dosis: 1 a 2 g/kg/día, dividida en una o dos tomas.
    • Aconsejar la administración por la mañana, en ayunas si es posible, y ajustar según respuesta clínica.
    • Tratamiento de complicaciones: fisuras anales (tratamiento tópico con blastoestimulina o corticoides locales como Synalar® rectal), derivación a gastroenterología ante impacto emocional o cuadros refractarios.

Conclusión La disquecia y la constipación funcional son entidades frecuentes y diferentes, cuya correcta diferenciación permite un abordaje terapéutico adecuado. Mientras la primera requiere empática observación y explicación, la segunda puede demandar intervenciones médicas concretas. La clave está en escuchar, educar y actuar con criterio clínico, evitando tanto la sobremedicalización como la subvaloración de los síntomas.

Referencias

1.Burgos F, González L, Leta K, Toca MC. Disquecia o constipación funcional, un desafío frecuente en la consulta pediátrica. Arch Argent Pediatr. 2025;123(3):e202410476. doi:10.5546/aap.2024-10476

2.Grupo de Trabajo de Constipación del Comité Nacional de Gastroenterología Pediátrica. Estreñimiento funcional en pediatría: diagnóstico y tratamiento. Arch Argent Pediatr. 2021;119(1):S39-S47. doi:10.5546/aap.2021.S39

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