Escrito por Karin Kopitowski
La semaglutida, conocida por su uso en el tratamiento de la diabetes tipo 2 y la obesidad, está mostrando potencial en el abordaje de ciertas adicciones.
Reducción del consumo de alcohol
Un ensayo clínico aleatorizado publicado en JAMA Psychiatry evaluó el impacto de la semaglutida en adultos con trastorno por consumo de alcohol (AUD). Se incluyeron 48 participantes (71% mujeres, edad promedio 39.9 años).
Los resultados mostraron que la semaglutida en dosis bajas ayudó a reducir el consumo de alcohol en condiciones de laboratorio:
- Gramos de alcohol consumidos: β = −0.48 (IC 95%: −0.85 a −0.11; P = .01) → En términos simples, quienes recibieron semaglutida bebieron significativamente menos alcohol que el grupo placebo.
- Concentración pico de alcohol en aliento: β = −0.46 (IC 95%: −0.87 a −0.06; P = .03) → Esto significa que el nivel de alcohol en sangre de quienes tomaron semaglutida fue más bajo que el de los que recibieron placebo, lo que refuerza que bebieron menos.
- Bebidas por día de consumo: β = −0.41 (IC 95%: −0.73 a −0.09; P = .04) → Las personas que tomaron semaglutida no dejaron de beber por completo, pero cuando lo hicieron, bebieron menos que el grupo control.
- Deseo de alcohol semanal: β = −0.39 (IC 95%: −0.73 a −0.06; P = .01) → Además de reducir el consumo, la semaglutida también disminuyó el deseo de beber.
- Reducción de consumo excesivo de alcohol en el tiempo: β = 0.84 (IC 95%: 0.71 a 0.99; P = .04) → A lo largo del tiempo, las personas que tomaron semaglutida redujeron más su consumo excesivo en comparación con quienes recibieron placebo.
Sin embargo, no se encontró diferencia en la cantidad promedio de bebidas consumidas por día ni en la cantidad de días de consumo.
Disminución del consumo de tabaco
El estudio también exploró el efecto de la semaglutida en una submuestra de participantes fumadores y encontró una reducción significativa en la cantidad de cigarrillos por día:
- Cigarrillos diarios: β = −0.10 (IC 95%: −0.16 a −0.03; P = .005) → Esto significa que quienes tomaban semaglutida fumaban menos cigarrillos que quienes recibieron placebo.
Estos hallazgos sugieren que la semaglutida podría estar modulando los circuitos cerebrales de recompensa, reduciendo tanto el consumo de alcohol como el de tabaco.
Si bien los resultados son alentadores, aún se necesitan más estudios para confirmar si la semaglutida podría ser una herramienta útil en el tratamiento de adicciones.
Referencia: JAMA Psychiatry. Hendershot CS, Klein KM, Lundahl LH, et al. Effect of Low-Dose Semaglutide on Alcohol Use in Adults With Alcohol Use Disorder: A Randomized Clinical Trial. JAMA Psychiatry. 2025;82(3):243-251. doi:10.1001/jamapsychiatry.2025.0123
Interesante!